Buscar Destinos...

lunes, 22 de diciembre de 2008

Harbin : lo último de China



Vino el tren, separación con rulo y a seguir viaje.

Harbin es una ciudad China pero como está próxima a Rusia tiene mucho de su cultura, lo cual fue muy loco para mi encontrarme con las primeras construcciones, iglesias, monumentos de guerra, etc.


En las grandes ciudades chinas uno puede hablar un 10 por ciento ingles, si uno se aleja de ahí, habla el 0% como me pasó.

Llegué a Harbin y el clima cambio totalmente. Pocas veces sentí el frío que experimenté ahí. Habrán habido veinte grados bajo cero. La ciudad estaba cubierta de nieve.


Ni bien llegué, lo primero que tuve que hacer fue buscar el hotel donde podía comprar el pasaje del transiberiano. Decidí tomarme un taxi ya que me estaba congelando.

Le mostré la dirección al taxista y no les miento, hizo como ese capítulo de los Simpsons donde llevan a Bart y Lisa a vivir con los Flanders y al segundo de arrancar el auto, llegan al destino. El taxista hizo media cuadra y me dejó en el hotel. No lo podía creer.


Después de comprar el pasaje, me tomé el bus que me llevaba a mi hostel. Fue imposible la comunicación, para variar. Llegué al hostel y lo sorprendente fue que era un HOTELLING INTERNACIONAL, o sea una cadena reconocida a nivel internacional. Bueno, en todo el hostel no había una sola persona que hable inglés.

En los tres días que estuve en la ciudad me comuniqué por señas y gestos. Cuando iba a comer a un resto, le mostraba una nota que decía “ noodles por favor”. Cada vez que entraba a un lugar me miraban como si fuera un OVNI o algo así.

La falta de comunicación fue tan terrible que pasé 4 días sin hablar. Apenas me manejaba con notas.

Me tomé dos días para recorrer la ciudad. Miren lo que me pasó el día antes de irme, no me lo van a creer.

Estaba recorriendo la ciudad cuando se hicieron las tres de la tarde. Fotos por aquí, fotos por allí, cuando de golpe tomo una decisión que iba a cambiar el transcurso del día. Harto de sacarme auto fotos, le pido a un chino si por favor me podía sacar una.
Apenas le doy la cámara, éste la deja caer al piso!!!

El resultado fue que se destruyó toda la lente! Me desesperé por los siguientes motivos:
No tenía más dinero para gastar. Todo estaba distribuído en días exactos y no me podía comprar otra cámara.

Me estaba yendo al día siguiente y tenía que arreglar o conseguir una cámara para el viaje si o si.

Bueno el chino se dio cuenta de la bronca que tenía y con señas me hizo entender que sabía dónde la podíamos arreglar. Fuimos a una casa Olimpus y me dijeron que la cámara estaba muerta. A esto el chino me dice: “ hay cámaras económicas por 200 dólares, no es tanto”, tenía mucha bronca. Le dije que no tenía dinero y que tenia que resolver eso. De ahí me llevó a otro lugar.


A todo esto le di mi cámara para que sea el interlocutor, ya que si me ven a mi desesperado me iba a cobrar un millón de dólares. Imaginen esto: Una casa Olympus me ve llegar con apariencia de gringo dólar, sin entender el idioma y sabiendo que la tenía que arreglar en 4 horas.
Todo el baile me costó cien dólares que me duelen hasta el día de hoy, pero bueno, al final terminamos todos amigos.




2 comentarios:

Rencoroso dijo...

Chino oltiva!
Buen blog che y gracioso.. hay data que me puede ser útil.

Ignacio dijo...

Groso el viaje. Una grande